Este libro reúne 12 estudios que analizan la construcción de escuelas en los campos de Chile, Brasil, Argentina, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Cuba, Haití, Puerto Rico, República Dominica y México durante los siglos XIX y XX. A través de diferentes perspectivas teórico-metodológicas, los autores buscan repensar la relación entre la escuela y la ruralidad en América Latina, y discutir en torno al papel de la escuela en los procesos de modernización económica y cultural de las comunidades rurales, en el desarrollo del capitalismo, en el fortalecimiento de los Estados nacionales y en la transformación de las mentes y las formas de vida. Así, esta obra abre paso a la realización de análisis comparativos que trasciendan las fronteras de cada nación, pero partiendo de las particularidades de las realidades locales, regionales y nacionales.